Colosal, sí, tal y como suena, de coloso, porque hay que mostrarse como todo un coloso para manifestarse en esa frecuencia tan distinta y en contraposición a la del periodismo deportivo que predomina hoy en los medios masivos. Un plano que dista lo necesario del que prioriza el beneficio del empresario por delante de la cultura y la actitud de promover una crítica constructiva que vaya más en consonancia con la verdadera esencia del deporte.
El periodismo deportivo de actualidad provoca la polémica sin cuartel y atrapa al espectador en una confrontación donde inconscientemente el groso de la población necesita para reivindicar y sacar fuera toda la basura acumulada en el seno de una sociedad ante la incapacidad latente para revelarse debidamente por cuestiones más importantes.
El periodismo deportivo de actualidad provoca la polémica sin cuartel y atrapa al espectador en una confrontación. Francisco Javier Rosales
Mientras sigamos sumidos en estos comportamientos estaremos contribuyendo a llenarle los bolsillos, de mala manera, a personajes cuyo principal objetivo es el cuánto y no el cómo, ni el para qué; entes subordinadas al capitalismo que no aman el deporte y mucho menos entienden la importancia de su verdadera esencia.
El juego trasladado al deporte es uno de los pilares de la sociedad desde tiempos inmemoriales en la historia de nuestra civilización y vehículo de comunicación entre diferentes culturas; el deporte es unión, desde la competitividad y búsqueda de la excelencia del ser humano, donde se crea un espectáculo por sí solo y los espectadores sienten la necesidad de compartir e inspirarse, para posteriormente recrear los principios fundamentales contemplados (respeto, valor, educación, diversión, disciplina, competitividad, afán de superación, etc…) en cualquier plano de la vida.
El manejo televisivo, la publicidad, más otros asuntos internos directa o indirectamente relacionados, han pasado de ser el medio y el canal para hacer llegar a las personas de cualquier estrato socioeconómico un espectáculo de culto, evolucionado, con una historia y legado social, a ser el arma de manipulación masiva a favor de un sistema de gobierno que empieza a tornarse insostenible.
Los que entienden el deporte y lo tienen integrado, lo hemos jugado, vivido y competido desde muy temprana edad, estamos ante la oportunidad que brinda este momento histórico, dónde esa red de redes que nos conecta a todos hace posible que este mensaje pueda llegar a ti; nos pone al alcance una infinidad de información y la posibilidad de contrastarla a golpe de click.
Luego de un largo periodo de adaptación empezamos a dominar esta herramienta tan poderosa para discernir el verdadero significado de las cosas tomando conciencia definitivamente de que la razón es como la luz, es algo de lo que no podemos huir.
La razón es como la luz, es algo de lo que no podemos huir.Francisco Javier Rosales