Probablemente hayas estado en una situación en la que dudabas si realmente estabas enamorado, o si, por lo contrario, era simplemente dependencia emocional.
Ahora, imagina que te encierran en un cuarto a oscuras, tu salida y tu vida dependen únicamente de que puedas cumplir con una orden. Estás allí asustado, esperando las indicaciones, atento a la única salvación que tienes; luego de un momento escuchas una voz decir: “entre esta oscuridad ubica un objeto de color blanco”(…) ¿Cuántas probabilidades tienes de salvarte? Es un imposible ¿cierto?
Así como son nulas las oportunidades de salvarnos si buscamos algo que no sabemos, igualmente el fracaso llamará a nuestra puerta una y otra vez hasta que no estemos claros de lo que es el verdadero amor. Diariamente escuchamos situaciones de sufrimiento provocadas por un mal amor, nosotros mismos quizás hemos sido protagonistas de momentos amargos en nombre del amor. Y todo esto es debido a lo cegados y confundidos que estamos a la hora de amar. Son innumerables las veces que escuchamos el sufrir por amor, queremos creer que el amor tarde o temprano nos llevará al sufrimiento, a la agonía, y por eso debo disfrutarlo hasta la saciedad en el momento en que sienta tenerlo cerca. Para no incurrir una y otra vez en los mismos errores es importante quitarnos la venda de nuestros ojos y entender la diferencia entre la dependencia emocional y el amor auténtico.
Las diferencias entre el amor auténtico y la dependencia emocional
La dependencia emocional no es más que un falso amor, en un momento puede llegar a confundirse, incluso ser muy parecido a él. Las consecuencias de colocar nuestra atención en relaciones dependientes no tardan en surgir al llegar la ansiedad y las ganas de querer luchar por no perder eso que llamamos “amor”.
Nos cuesta aceptar que estamos bajo una relación dependiente por el hecho de que una y otra vez nos hemos repetido que estamos viviendo en el amor, pero nada más distante de la realidad. A veces para tener respuestas concretas sobre lo que sí es el amor auténtico, utilizamos la herramienta del descarte que implica detectar de forma más fácil lo que no es. Si una relación trae consigo dudas, problemas constantes, depresión, ansiedad, momentos de ira, humillación, estamos envueltos en una relación totalmente tóxica o lo que es lo mismo una relación dependiente.
Nos cuesta aceptar que estamos bajo una relación dependiente por el hecho de que una y otra vez nos hemos repetido que estamos viviendo en el amor, pero nada más distante de la realidad.Luisana Aláez
Conceptos errados del amor
Detrás de una relación dependiente, hay dos personas faltas de amor propio buscando tirar en el otro la propia basura interna que los persigue, buscando encontrar culpables externos de frustraciones internas que se harán cada vez más profundas y dolorosas. Dos personas con conceptos errados del amor crean una relación de sufrimiento que muchas veces suelen tratarlo de esconder tras breves momentos de adrenalina emocional, pasión e instantes de placer. La relación que tenemos es el reflejo de lo que somos; personas inseguras tendrán relaciones inseguras, personas con falta de amor propio tendrán relaciones de maltrato, personas conflictivas generarán relaciones de conflicto constante.
La única manera de tener éxito en el amor y llegar a experimentar de lleno ese sentimiento tan majestuoso y puro es descubrir las razones correctas por las que elegimos estar con alguien más. Por ejemplo si el miedo a la soledad nos envuelve fácilmente confundiremos amor con cualquier muestra de afecto que nos den, si hay inseguridad dentro de mí confundiré el amor con la primera persona que me elogie sobre algo que yo mismo no soy capaz de percibir ni amar de mí. Si buscamos saciar nuestras carencias internas con relaciones externas entraremos en un círculo de dependencia que nos hará sufrir cada vez más.
Ser consciente de mis necesidades y sentirme un ser completo es la primera batalla a ganar contra la dependencia emocional; entender que soy yo el responsable de cubrir todas mis necesidades me hará relacionarme sanamente a través del amor auténtico, un amor libre de necesidades y carencias impuestas.
Ser consciente de mis necesidades y sentirme un ser completo es la primera batalla a ganar contra la dependencia emocional.Luisana Aláez
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